l director ejecutivo de la Agencia de Recaudación Fueguina (AREF), Oscar Bahamonde, anunció que en los próximos días entrará en vigencia una nueva moratoria fiscal para contribuyentes con deudas vencidas hasta el 30 de noviembre. Según explicó, la herramienta fue elaborada a partir de un proyecto unificado entre el Ejecutivo y la Legislatura, y obtuvo el acompañamiento de todos los bloques.
Explicó que la iniciativa responde a un pedido del sector privado, especialmente de las cámaras de comercio. La propuesta contempla quitas de intereses y planes de pago en hasta 60 cuotas, con beneficios diferenciales para grandes y pequeños contribuyentes.
Bahamonde detalló que los contribuyentes con facturación anual menor a 2.000 millones de pesos podrán acceder a una quita del 100% de los intereses si cancelan su deuda al contado. Si optan por cuotas, el descuento disminuye progresivamente: “Va decreciendo el descuento a medida que crece la cantidad de cuotas. En el máximo, que es de 60, tendrán un 20% de descuento”, señaló.
En el caso de grandes contribuyentes, la quita al contado será del 60%, con escalas de descuentos que bajan hasta el 20% según la modalidad de pago. “Por eso siempre planteamos que lo que más beneficio le da al contribuyente es que pueda regularizar pagando de contado”, agregó.
El funcionario explicó que el monto de los intereses acumulados es significativo, debido al contexto inflacionario de los últimos meses. “Desde la moratoria anterior a esta, hubo periodos de altísima inflación. Las tasas de interés fueron muy grandes”, recordó.
También destacó que el programa busca beneficiar a quienes mantienen deudas en etapa administrativa o judicial. “Antes de llegar a un embargo en una cuenta que le complique el giro comercial, las moratorias por lo general le vienen muy bien a todos aquellos que están en etapa judicial”, sostuvo.
Desde el punto de vista operativo, la AREF permitirá iniciar el trámite en forma digital. “La gestión desde adentro se hace por parte de AREF, y luego el seguimiento y el pago siempre es a través de un mail o una vía electrónica. No es necesario ir presencialmente”, aseguró.
Bahamonde precisó que el plan tendrá una vigencia de 60 días desde su promulgación, y que en ese plazo los contribuyentes podrán regularizar sus deudas fiscales sin perder su condición de cumplimiento. “Para obtener el certificado de cumplimiento fiscal hay que estar regularizado, no se piden las deudas pagas. Es una herramienta muy válida”, afirmó.
